Por la baja de la inflación, los préstamos personales se triplicaron en 2024
El sector financiero se encuentra en un proceso de reconfiguración que da mayor protagonismo al crédito privado.
El último año ha sido de gran movimiento para el sector financiero en Argentina. Con la asunción del gobierno de Javier Milei, las tasas de referencia superaban el 100%, lo que establecía un piso alto para instrumentos como los plazos fijos y generaba especulaciones sobre posibles incrementos para absorber el exceso de pesos en circulación.
En la actualidad, la tasa de política monetaria efectiva anual se ubica en 33,63%, sin la exigencia de un piso mínimo para los bancos y con posibilidad de nuevas reducciones a lo largo del año, en sintonía con la desaceleración inflacionaria. Este nuevo escenario ha modificado las condiciones para la oferta y demanda de productos financieros, afectando especialmente a los préstamos personales.
El crecimiento de los préstamos personales
Según el último informe monetario mensual del Banco Central de la República Argentina (BCRA), los préstamos personales en pesos pasaron de $2,01 billones en enero de 2024 a $10,7 billones en enero de 2025. Esto implica un aumento interanual real del 204%, considerando el efecto de la inflación.
El economista Damián Di Pace, director de la consultora Focus Market, explicó a Infobae que esta expansión está directamente relacionada con la reducción de tasas. "El recorte de la tasa de política monetaria no incentiva a los bancos a mantenerse en letras del BCRA, por lo que parte de esos fondos se redirigen a préstamos para el sector privado", señaló.
Destino del financiamiento
De acuerdo con Di Pace, el crédito privado se destina a distintos propósitos:
Compra de bienes durables: automóviles, motocicletas, electrodomésticos y artículos para el hogar.
Créditos hipotecarios: en fase de reactivación tras varios años de estancamiento.
Consumo general: financiamiento de gastos cotidianos a través de préstamos personales.
"La mayor demanda se observa en bienes durables y productos tecnológicos. Los sectores que requieren financiamiento están aprovechando la mayor disponibilidad de créditos", destacó el economista.
Expansión del crédito en todas las líneas
Si bien el alza de los préstamos personales ha sido notable, el crédito en general también creció en el último año:
Hipotecarios: aumento real del 84,9%.
Prendarios: suba del 95,1%.
Créditos mediante "documentos": incremento del 99,9%.
Adelantos: crecimiento del 72,2%.
Financiación con tarjetas de crédito: expansión del 66,8%, pasando de $5,1 billones a $14,9 billones.
Préstamos en la categoría "otros": incremento del 105,7%.
En total, los préstamos al sector privado aumentaron de $15,6 billones en enero de 2024 a $54,2 billones en enero de 2025, lo que representa un alza nominal del 246,7% y un incremento real del 98,7%, evidenciando que el monto de dinero otorgado en créditos se duplicó en un año.
Perspectivas para el futuro
El sector financiero está en proceso de transformación, con una menor dependencia de las letras del BCRA y una mayor participación del crédito privado.
Di Pace anticipó que "a lo largo del año veremos más recortes de tasas, lo que podría incentivar aún más el crecimiento del financiamiento para consumo y bienes durables".
Si la inflación sigue disminuyendo y las tasas continúan bajando, la tendencia alcista de los préstamos podría consolidarse, impulsando la reactivación económica y fortaleciendo la capacidad de compra de los hogares argentinos.