Quién era Catalina Gutiérrez: la joven libertaria que murió en manos de su amigo

En un trágico hallazgo ocurrido en la madrugada del jueves, el cuerpo sin vida de Catalina Gutiérrez, una joven influencer de 21 años, fue encontrado en un descampado de la capital cordobesa, dentro de un Renault Clio incendiado. Néstor Soto, conocido como "Tito" o "Nuni", hijo de una funcionaria municipal kirchnerista en Bariloche y amigo de la víctima, está detenido como principal sospechoso del homicidio.

Soto, que inicialmente se presentó como conocido de la víctima, terminó confesando el crimen durante su declaración. "Era el amor de mi vida", fue la impactante confesión del acusado, según informó el fiscal José Mana, quien tiene a su cargo la investigación. Mana tiene previsto interrogar a Soto nuevamente la próxima semana y reunirse con la familia de Catalina para discutir los avances del caso.

Catalina Gutiérrez, estudiante de Arquitectura en la Universidad Nacional de Córdoba y con más de 100 mil seguidores en Instagram, era conocida por su presencia en redes sociales, donde promocionaba fiestas y productos, además de compartir sus viajes por Buenos Aires, Rosario y Brasil. En 2023, también utilizó sus redes para apoyar a Javier Milei y participar activamente en la fiscalización de La Libertad Avanza, el partido político con el que estaba comprometida.

El hallazgo macabro se produjo cuando el cuerpo de Catalina, que había sido sometido a una brutal paliza y estrangulamiento, fue encontrado dentro del auto incendiado. La causa de muerte, según el informe preliminar, fue asfixia por estrangulamiento. Su desaparición fue reportada el miércoles alrededor de las 21 horas, después de que Catalina solicitara el auto a su madre para encontrarse con amigas en el Patio Olmos, pero nunca llegó a la cita. La ubicación del vehículo y el cuerpo fueron descubiertos gracias al rastreo del iPhone de la víctima.

Néstor Aguilar Soto, originario de Bariloche, se mudó a Córdoba hace tres años para estudiar Arquitectura en la UNC, donde desarrolló una amistad con Catalina Gutiérrez. Aunque no tenía antecedentes penales, su relación con la víctima se limitaba a una amistad, y Catalina lo había etiquetado en varias publicaciones en redes sociales. A pesar de no haber evidencia directa de acoso o obsesión, los investigadores continúan analizando sus redes sociales para obtener más detalles sobre su comportamiento hacia Catalina.

Soto, quien inicialmente se presentó como testigo, ofreció un relato lleno de contradicciones y nerviosismo, hasta que finalmente confesó su responsabilidad en el asesinato. Actualmente, enfrenta una imputación por homicidio simple, sin el agravante de "violencia de género". La investigación avanza con peritajes adicionales en la escena del crimen, recopilación de testimonios y análisis de los teléfonos móviles involucrados.

Marcelo Gutiérrez, padre de Catalina, expresó su profundo dolor y exigió justicia. En declaraciones a ElDoce TV, destacó que creía que la relación entre su hija y Soto era únicamente amistosa. A pesar de esto, mencionó que los hechos le hicieron sospechar que Soto podría haber mostrado signos de acoso, aunque esto no está confirmado oficialmente. "Lo único que quiero es justicia y que se pudra en la cárcel toda su vida porque no se merece vivir en esta sociedad", declaró con gran indignación.