El Gobierno disolverá AFIP y creará la Agencia Nacional de Recaudación
Este movimiento busca mejorar la eficiencia y la transparencia en el sistema tributario argentino.
El gobierno de Javier Milei ha anunciado un cambio significativo en la estructura de recaudación del país: la disolución de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y la creación de la Agencia Nacional de Recaudación (ANR). Este movimiento busca mejorar la eficiencia y la transparencia en el sistema tributario argentino.
Durante la presentación de la nueva agencia, el vocero oficial, Manuel Adorni, expresó: "El Gobierno anuncia con satisfacción que la AFIP dejará de existir". Además, se confirmó que Andrés Gerardo Vázquez asumirá la dirección de la nueva Dirección General Impositiva (DGI), mientras que José Andrés Velis será el nuevo encargado de la Aduana. Ambos reemplazarán a Gabriel Ramírez y Eduardo Mallea, respectivamente, aunque la actual titular de la AFIP, Florencia Misrahi, continuará en su puesto.
Según fuentes del Gobierno, la ANR contará con una "estructura simplificada", con una reducción del 45% en las autoridades superiores y un 31% en los niveles inferiores de la organización actual. Esta reestructuración también implicará la reubicación y la disponibilidad de aproximadamente 3.100 empleados que, según el Gobierno, fueron incorporados de manera irregular durante la administración anterior. Se estima que esta medida generará un ahorro presupuestario anual de $6.400.000.000.
Además, se destacó que el titular de la AFIP y los directores de la DGI y Aduana dejarán de percibir el suplemento de jerarquización, pasando a cobrar salarios equiparables a los de Ministros y Secretarios. Esta decisión responde a la necesidad de optimizar la administración de los recursos públicos y mejorar la capacidad de respuesta ante las demandas del sistema tributario y aduanero.
El nuevo enfoque del Gobierno también busca implementar sistemas de control y evaluación más efectivos, mejorando la transparencia y la rendición de cuentas. El objetivo es garantizar una mayor y mejor recaudación, así como un control aduanero más riguroso.
Cabe recordar que esta reestructuración no es nueva; el gobierno ya había comenzado a realizar cambios significativos en la AFIP a través del Decreto 559, publicado el 3 de julio, que centró las funciones fiscales en la DGI y eliminó varias estructuras jerárquicas.