Prohibieron la entrada a la cancha a los barras que participaron de los disturbios
El Gobierno de Javier Milei prohibió el acceso a estadios a 26 barras bravas. Están involucrados en los disturbios del Congreso del 12 de marzo. La medida fue oficializada por la resolución 343/2025.
El Gobierno de Javier Milei ha decidido imponer una estricta sanción a 26 barras bravas implicados en los disturbios ocurridos en las inmediaciones del Congreso Nacional el pasado miércoles 12 de marzo, durante el intento de golpe de Estado que alteró la calma de la ciudad. La medida consiste en la "Restricción de Concurrencia Administrativa", lo que les prohíbe el acceso a cualquier evento deportivo a nivel nacional, por tiempo indefinido.
Según la resolución 343/2025, publicada en el Boletín Oficial, los involucrados están imputados por el delito de "atentado y resistencia a la autoridad". Esta decisión, explicada por el Gobierno de Milei, surge a raíz de los violentos episodios ocurridos durante una manifestación en apoyo a jubilados y pensionados. Los disturbios, protagonizados en su mayoría por grupos identificados con barras de clubes de fútbol, derivaron en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, lo que requirió la intervención de Gendarmería Nacional, la Policía Federal Argentina, Prefectura Naval Argentina y la Policía de la Ciudad de Buenos Aires.
El Gobierno ha justificado la medida como una acción necesaria para preservar el orden público y evitar que personas que ya demostraron su capacidad para generar violencia tengan acceso a los estadios, un entorno donde la seguridad es primordial. Además, la normativa establece que estas personas serán registradas en el programa "Tribuna Segura", lo que les impedirá participar en futuros encuentros deportivos. En total, doce de los detenidos ya tenían antecedentes penales y órdenes de arresto previas.
Los incidentes en el Congreso fueron particularmente graves, con agresores arrojando piedras, objetos punzocortantes y otros proyectiles a las fuerzas de seguridad, lo que resultó en la lesión de 31 efectivos. La violencia se prolongó por más de tres horas, con las fuerzas de seguridad respondiendo con balas de goma, gases lacrimógenos y camiones hidrantes.
El Gobierno también destacó el vínculo de algunas barras bravas con punteros políticos, particularmente del kirchnerismo, lo que ha alimentado aún más las tensiones y el clima de inestabilidad.
Esta medida se toma en el contexto de un creciente descontento en la sociedad con la violencia asociada a los grupos de hinchas y su influencia en la política, y marca un firme paso del Ejecutivo de Milei en su lucha por erradicar estos grupos del ámbito deportivo y social.